Ana María Quispe Díaz, nacida y criada en Perú, asegura haber sido víctima de acoso sexual por parte de dos sacerdotes católicos de la Arquidiócesis de Chiclayo cuando era niña.
Hoy se encuentra en Chicago para denunciar lo que vivió y pedir que exista alguna acción en contra de estos abusos que ha vivido estos niños.
“Él nos saludaba cubriendo nuestro cuello… y yo sentía como que me besaba en la boca o en la mitad de mi boca” comentó Díaz.
Sin embargo, la situación se repitió en otra ocasión.
“Él saca la silla, me siento en sus piernas y empieza a besarme en la boca. Yo me quedé congelada. Solo sentía cómo metía su lengua en mi boca”, agregó Díaz.
Tiempo después, cuando tenía 12 años y participaba en una misión, señala que vivió otro abuso con un sacerdote cercano a su familia.
“En la noche me mostró una cama para acostarme… luego vi que se estaba quitando la ropa y sentí que se acostó a mi lado. Me hice la dormida y me abrazó con brazos y piernas.”